María Luisa Ruiz Jarabo en 1998, cuando tenía 33 años, sufrió un accidente esquiando en Sierra Nevada, España. Justo antes del accidente se había divorciado y llevaba una vida agitada, con salidas nocturnas, deportes de riesgo, probando todo tipo de drogas…
Tras el accidente quedó tetrapléjica. Asumió su tetraplejia sin dramas, con una serenidad que venía de Dios. Durante su estadía en el hospital se confesó y recibió la comunión y comenzó así a enamorarse de Él.
“La vida es digna porque viene de Dios y sus condiciones se pueden mejorar para que nadie quiera renunciar a ella”
María Luisa Ruiz Jarabo
María dice que la silla de ruedas ha mejorado su vida porque, gracias al accidente ha conocido a mucha gente especial y también se encontró “lo mejor”: a Dios quien es ahora su mejor amigo.
» A partir de ahí viví con una paz increíble porque estaba en manos de Quien más me quiere: Dios»
María Luisa Ruiz Jarabo
Durante varios veranos ha participado como voluntaria para ayudar a mutilados por las minas de Camboya. No le teme «a nada» y hasta volvió a esquiar. Su historia es prueba irrefutable de que toda vida es digna.
En el canal de Mater Mundi TV podrás ver el testimonio completo:
María Luisa Ruiz Jarabo: la historia de una vida digna.
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